Manolito Gafotas

¡Cómo molo!

(Otra de Manolito Gafotas)

1. Referencia bibliográfica completa

·         Título: ¡Cómo molo! (Otra de Manolito Gafotas)

·         Autora: Elvira Lindo

·         Primera edición: febrero 1998

·         Sexta edición: mayo 2000

·         Ediciones 1996, Grupo Santillana de Ediciones, S.A. Torrelaguna, 60. 28043 Madrid

·         Foto contraportada e interior: Emilio Urberuaga

·         Diseño gráfico de la colección: José Crespo, Rosa Martín y Jesús Sanz

·         Número de páginas: 123

2. Resumen del contenido

Este libro se ve claramente que es el tercero de una colección, de hecho el propio protagonista lo dice. Para que el lector pueda centrarse en la historia ha de haberse leído, al menos, uno de los dos anteriores, ya que Manolito Gafotas, da por sentado el reconocimiento por parte de éste de algunos aspectos de su vida; como por ejemplo el lugar donde vive: Carabanchel Alto, su círculo de amigos: el Orejones López, la Susana Bragas Sucias, Yihad, su hermano pequeño: al que llama el Imbécil, el nombre del camión de su padre: Manolito, su vecina: La Luisa, el lugar donde juega: el parque del Ahorcado… En la introducción, las preguntas de un niño, uno de los seguidores de los libros, sirve como vínculo para organizar un poco los personajes con sus dibujos (p.14-15).

Respecto al lenguaje que se utiliza en la obra, es un lenguaje sencillo y coloquial, destinado a niños que se encuentran en los últimos cursos de primario o en el primer ciclo de secundaria. Como muestra de ello utiliza un argot juvenil: Ellos se apuntan a un bombardeo (p.18), descarao  (p.38), cómo molo (p.38), pasmao (p.40), sopinstant (p.43), chachi (p.46), la Luisa (p.49), la Melani (p.82), superpotente (p.56), asfixiao (p.65), bajini (p.71), entre otros. La mayoría del vocabulario de este libro es de fácil comprensión para el lector salvo alguna palabra como: tétrico (p.37) y hecatombe (p.76).  Además, Manolito se dirige al lector de una manera directa, haciendo énfasis en segunda persona del singular, tratándole de tú: Como verás (p.17), te recomiendo (p.31), te lo juro (p.40), te aviso (p.50), no te enteras (p.55), te resumiré (p.95), te darás cuenta (p.97), pruébalo (p.115). Otra de las características del protagonista es el uso de la ironía como puede ser: iba por el tercer bermú (p.24), un regalito verde (p.27) o un pedazo de pan con gafas (p.118). Por último, como palabras significativas y de fácil reconocimiento respecto a este niño, son el uso abundante de las palabras: mundo mundial, rollo repollo y el principio de los tiempos.

Destinado a lectores de esta edad, el libro va apoyado de gran cantidad de dibujos aclaratorios. Siempre hay una al inicio de cada capítulo además de uno o dos más a modo de explicación y haciendo más dinámica la lectura. Por ejemplo: las cartas que le escriben sus amigos a Manolito cuando están de vacaciones (p.23), la bienvenida de su tío y su prometida cuando llegan al aeropuerto (p.69) o  su hermano pequeño columpiándose mientras el resto de compañeros de clase lloran (p.121).

Para finalizar, una muestra de que este libro fue escrito en los años noventa es que se habla de la participación en “Lluvia de Estrellas” programa de televisión de los noventa (p.20), de Michael Jackson, ya fallecido (p.62) y que Manolito le corrige a su amigo en la carta que Hola va con H, algo que los niños de hoy en día, con el uso de las nuevas tecnologías, no lo habrían hecho; por no nombrar que en la actualidad los niños ya no escriben cartas.

3. Crítica y valoración

            Este libro de Manolito Gafotas, al igual que el resto de su colección, es un libro divertido y de fácil lectura. A pesar de que toda la historia es narrada en primera persona por Manolito Gafotas existe una gran variedad de personajes, del mismo modo que las intervenciones que el protagonista le hace directamente al lector, consigue que éste se implique más en la obra.

            Por otro lado, lo que hace rápida la lectura de este libro es la brevedad de sus capítulos, de un máximo de diez hojas con gran cantidad de dibujos a modo de resumen.

             

           

4. Breve conclusión

            Como conclusión, considero que con este personaje conocido por todos, Elvira Lindo ha conseguido captar a los niños y no tan niños, y fomentar su lectura de una manera divertida. El lector, a través de las gafas de Manolito, puede ver un entorno divertido, con ironía y sin preocupaciones, salvo la de alguna que otra colleja.

En las historias que nos cuenta Manolito se fomenta la amistad, el trato con la familia (sobretodo la relación que tiene éste con su abuelo y su hermano) y además nos muestra la vida de antes, la vida en un barrio, la que como el mismo protagonista dice, aquella en la que todos se llevan bien, tienen la llave de sus vecinos, les riegan las plantas cuando se van y viven tranquilos, en confianza y sin los grandes problemas de la sociedad de hoy en día.

Gema Mirón Díaz